Hoy os escribo esta entrada, no solo por haber descubierto la cuartas, quintas y sextas que se cantan en Semana Santa en Marchena, sino por su parecido más que razonable con las sátiras de Loja.
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Este año hemos descubierto la
maravillosa Semana Santa de Marchena de la mano de Juan Osuna, hermano del Cristo
de San Pedro y cicerone inmejorable de esta localidad sevillana.
Además de haber podido vivir un día
grande como es el Domingo de Resurrección, hemos podido apreciar su riquísimo patrimonio,
y la maravilla de titulares de sus diferentes hermandades.
A esta celebración de la Semana Santa
de esta localidad, se le acompaña de un cante, una sátira arcaica, que se le
llama de diferentes formas según tenga cuatro versos (cuartas), cinco (quintas)
e incluso seis (Sextas), algunas propias de determinadas hermandades, como por
ejemplos las quintas de la hermandad de Cristo de San Pedro.
Un cante arcaico, primitivo, con muy
poca variación melódica, y que no hemos podido desentrañar en nuestras
conversaciones con intérpretes y cófrades, su posible origen.
Algunos lo datan en la llamada a la oración
de los muecines o almuédanos, otros a los orígenes de los frailes que acompañaban
a las procesiones y que contaban la pasión de Cristo en diferentes versos que
anunciaban los diferentes episodios. Algunos nos han comentado que después de
la desamortización, los frailes desaparecen y es el pueblo el que de manera popular
recoge el testigo de cantarlos, más a su forma.
Algunos artículos hemos visto que
relacionan esta forma de cante con localidades como Alcalá de Guadaira y puede
que fuera así, pero curiosamente durante esta visita hemos podido comprobar que
hay una cierta conexión entre Marchena y otra población no hacia poniente, sino más
bien a levante, con Loja.
Parece ser que en Marchena muchas
personas tienen familiares que son originarios de la población granadina que
vinieron a comprar tierras de labor a mediador del S XX lo que ya nos habla de
lo vertebrador que era el intercambio en esa zona centro de Andalucía.
Probablemente antes ya hubiera más
que contactos, no solo económicos sino culturales lo que explicaría el interésante
mimetismo de esta saeta arcaica marchenera con las sátiras que cantan las
cuadrillas o corrías en Loja, siendo éstas de Loja de cinco versos.
Esto podría fundamentar quizás los
que comenta Diego J. Geniz en ese artículo el probable origen judío de las mismas.
Pero claramente además de esa conexión humana con Loja, hay otro detalle a la vista de todos que hace de esta localidad granadina al menos algo que había que investigarse con mayor profusión y es el cuadro de su desaparecido Nazareno en la peña Pepe Marchena. ¿Qué puede hacer un cuadro de un Nazareno de Loja, en una peña de Marchena dedicada al genial cantaor?
Así que, no sabemos el origen de esta
saeta misteriosa, si son decimonónicas o anteriores, pero claramente sería
interesante que se indagara en la relación de estas dos modalidades tan interesantes,
únicas y arcaicas que nos cuentan algo de nuestro pasado que no nos han contado
o que simplemente no se quiso que nos contaran.
Les invito a que lean el articulo que sobre las sátiras de Loja escribí el año pasado y a que comparen ambas modalidades de cante.
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