DIEGO CLAVEL: EL FULGOR DE UNA SUPERNOVA

Diego se va, no quiere cantar más. Se nos va una estrella para convertirse en una súpernova, cuyo eco deja en su cincelada obra discográfica, un destello perfectamente distinguible en el espacio flamenco por siempre y para siempre.

Su pueblo ha sabido hacer las cosas bien, y tanto el Ayuntamiento como la Peña Francisco Moreno Galván han acertado dando un verdadero y sentido homenaje a uno de sus hijos más ilustres, Diego Andrade Martagón. Fueron varios actos de mucho valor e interés, alguno de los cuales se pueden leer aquí, (de ellos debería hacerse eco el propio IAF) y que terminaban con este último recital.

El acto que hoy, triste como todas las despedidas, no solo ha sido emotivísimo sino que la Peña Moreno Galván había preparado un sencillo pero precioso acto de despedida.  Los artistas más jóvenes de la Puebla han venido a acordarse de la raíz del grito, y han cantado las letras de Francisco que registró Diego Clavel en los discos de los años 70 al 73.

Acto presentado por Manuel Curao que comienza el guitarrista cordobés, Antonio de Patrocinio interpretando un fandango al cual se le ha unido una hija de Diego, Marí Carmen, tocando las castañuelas. Lo dirá Rubito hijo más adelante, que importante la familia, cuando se está tan lejos y detrás de tantos kilómetros para tantos artistas…

Raúl Montesinos ha cantado la Malagueña de la Trini, con ese eco a verdial de la Axarquia que solo nos falta escuchar el violín y los crótalos. Después una petenera y ha finalizado con unas impolutas seguiriyas por el Loco Mateo, terminado por el cambio de Manuel Molina, que tanto cantó el Clavel. Máxima honestidad.

Luego ha subido la joven morisca María Jesús Bernal, ganadora de numerosos concursos, entre ellos el concurso andaluz de jóvenes flamencos. Bulerías por soleá, Seguiriyas de caramelo, y unos tangos. Su voz es añeja como un buen queso. Letras de muchos antes de que ella naciera, discos de incluso antes de este que les escribe…pero aquí estamos, como eslabones de la cadena.

Rubito hijo comienza por Tientos. Su voz nos sabe a mistela. Sigue por Soleá donde se deja sentir, y acaba por unas tonás por Martinetes bien afinadas para deleite del respetable. ¡Ole la Puebla!

Gratísimo homenaje de los suyos, todo un espectáculo astronómico a siempre vista,  la estela del cometa y el eco de la supernova.

Era el momento de Diego, que se disculpa, como no queriendo, pero que ya no le gusta cómo suena su voz. Que ya no llega a los tonos….se va como no queriendo, como pidiendo disculpas. Se va como fue su carrera, con la sencillez como bandera, pero con la hondura de su obra. Va acompañado de uno de sus últimos guitarristas, Antonio Carrión.  Dice que ya después de ésta “no canta, ni para afeitarse”.

Diego comienza por Romances, tenía la espinita clavá de la última reunión en la Puebla, donde se le había ido la letra. Hoy no hay circunstancia ni accidente, hoy se acuerda de Francisco y de Pepe Meneses. Hoy se acuerda de un tiempo donde los colosos vivían en la Puebla y hoy se convierten en titanes.

Luego hace la Solea de Joaniquin. Se nos hace muy raro pensar que no va a cantar más… Le siguen peteneras y unas marianas maravillosas.

Dice Manuel Curao que Diego no ha dejado una obra, ha dejado un cuaderno de bitácora, una guía para viajar al espacio de los diferentes estilos de los palos, de esas estrellas que más brillan.

Diego no sabe si repetir por Romances, y hacerse para terminar los campanilleros, pero el respetable le espeta y le dice que no puede irse sin hacer las seguiriyas. Las hace y nos levanta del asiento. Diego se levanta y se abraza, abrazándonos a todos al mismo tiempo, leyéndose en sus labios un Hasta Siempre.

Nuestras casas están siempre abiertas para ti Diego y gracias, gracias, por tanto. Hoy dejas de ser estrella para ser supernova.

Ficha: 

Diego Clavel al cante, Antonio Carrión a la guitarra

Raul Montesinos, Maria Jesus Bernal y Rubito hijo al cante, con guitarra de Patrocinio Hijo.

Bodegas Fuentes, La Puebla de Cazalla (Sevilla)

5 de diciembre de 2021

Si has llegado hasta aquí leyendo,  te dejo su ultima soleá. 

Jose Carlos Medina · Diego - Clavel - Ultima - Soleá - 5 12 22