MUJERES

Domingo insospechado en la peña Torres Macarena, y por ello merecedora de esta crónica, no sólo del recital vive el flamenco en la marisma.

Lleno, si, lleno, para disfrutar de un día con tertulia, de menos corsés y más divulgación, de buen cocido de acelgas de Reyes y de chimenea.

Lleno, si, lleno, de contenido, con una conferencia a cargo de la profesora Ángeles Cruzado y también locutora de Flamenco Radio de Canal Sur Radio. Una delicia. Charla bien estructurada hablándonos de nuestra historia menos conocida y por ello oscura, la de las mujeres guitarristas…Anilla la de Ronda, Merche de Algeciras, aquellas que vivieron en el rincón, pero no por ello menos importantes. Hoy se hablaba de mujeres, de imperdonable olvido, de superponernos a otro tipo de culturas que no nos dejan avanzar en igualdad.

Hoy en la peña se hablaba de Adela Cubas  que su talento hacia que el cantaor que la acompañaba iba de eso, de acompañante, justo al contrario que ahora. De la Serneta, santo y seña de la capacidad de crear estilos y que se acompañaba a sí misma... de Isabel Burrull y de tantas otras…hoy se hablaba de ellas.

Y después de ese repaso, también de las mujeres guitarristas en nuestro propio tiempo, como la bellísima Mercedes Luján, para pasar a otras que viven en otros lares pero que llevan la guitarra a espacios excelsos. Si, ellas, las mujeres flamencas.

Después tuvimos cante. Clara Ojeda acompañada de Gastor de Paco, los dos estupendamente en este recital de pequeño formato.

Clara elegantísima, y afinada, sabiendo cuando hay que subir en los cantes. Gastor con ese toque de Morón inconfundible, y con las falsetas de sus mayores.

Empezó por soleares, “Y al infierno que te vayas/Yo me voy a ir contigo/Que yo me voy a ir contigo” que tan bien hacia Camarón. Luego la soleá de Alcalá de Juan Talega “deja que pasen tres días”.

Vamos por Cádiz en las alegrías “Existieron siempre en Cádiz /tipos de gracia y salero /en barrio Santa María, La Viña y el Mentidero”

Y finalmente por Bulerías, donde Gastor pierde una maravillosa cejilla que le acaban de regalar unos integrantes de la peña flamenca de Seul. Una cejilla blanca tocada con una cabecilla de caballo o de llama. La filigrana, segundamente por nueva, no se agarra al traste y salta… haciendo que Gastor tenga que buscar los tonos de toda la serie. Bien también por el guitarrista, momentos asi son los que curten.

El público entregado entre el buen toque de Gastor y el estupendo cante de Clara. El blanco del mantón lo luce. Se deciden a terminar por tangos.

Después tiempo para aficionados…que no lo parecen. 

El domingo ha sido insospechado. Aqui les dejo un video gentileza de Momi. A Clara nos gustaria verla en recital de gran formato defendiendo los ocho palos.